El gran cantante dominicano Antonio Mesa, El
Jilgero de Quisqueya, primer dominicano en poner su voz en el acetato (1926),
cuando era la primera voz del Trío Borinquen (cuando él grababa temas
dominicanos, el trío se nombraba Quisqueya por exigencia de nuestro jilgero);
le plantea al maestro borinqueño Rafael Hernández, quien era el director del
trío (el tercer integrante lo era el también boricua Salvador Ithier), que
siendo él un compositor que le había dedicado tantas canciones a su Puerto Rico
querido y siendo un patriota incansable, porqué no le había dedicado una a la
tierra quisqueyana de Mesa. Ante este planteamiento, el maestro Hernández, le
vino a la mente un tema que ya tenía escrito, pero no publicado, llamado “Linda
Borinquen”, el cual con sólo cambiarle Borinquen por Quisqueya, encajaba
perfectamente; sin embargo, hubo un detalle de la letra de la canción que el
maestro dejó intacto y que dejaba delatado su anterior dedicatoria borinqueña,
y es la estrofa donde dice “La estrella solitaria que alumbra mi vida”, ya que esa
estrella solitaria se refiere a la estrella que tiene la bandera de nuestro
hermano Puerto Rico.
De todas maneras, Mesa cambió esa estrofa en su
grabación por: “Bajo sus palmas y sol tan divinos”, aunque en la segunda voz de
Salvador Ithier, éste mantiene “La estrella solitaria…”
Definitivamente, siempre perduró la versión con
la famosa estrella de Borinquen.
Como siempre nunca dejo de resaltar de nuestro
casi desconocido Jilgero de Quisqueya, que grabó más de 50 temas de autores
dominicanos (esto solo en menos de 10 años), siempre estuvo luchando por que se
les reconociera su trabajo en términos remunerativos, y al final de su vida
este gran patriota dominicano, ¡MURIÓ DE HAMBRE!
VERSIÓN
INTERPRETADA POR ANTONIO MESA:
No hay tierra
tan hermosa como la mía
formada por
los mares de las espumas.
Parece una
gaviota de blancas plumas
dormida en
las orillas del ancho mar.
Quiequeya,
la tierra de mis amores,
de suaves
brisas, de ricas flores.
Yo quiero
estar en mi patria querida.
¡Quisqueya,
mi vida!
En mis
cantares, linda Quisqueya
yo te
comparo con una estrella.
Bajo sus
palmas y sol tan divino
me brinda
su luz.
Su luz de
amor.
VERSIÓN QUE
HA PERDURADO:
No hay
tierra tan hermosa como la mía
bañada por
los mares dos mares de blanca espuma.
Mares como
gaviota de blancas plumas
dormida en
las orillas del ancho mar.
Quisqueya,
la tierra de mis amores,
de suaves
brisas, de lindas flores.
Del fonde
de los mares la perla querida,
¡Quisqueya divina!
En mis
cantares, linda Quisqueya,
yo te
comparo con una estrella.
La estrella
solitaria que alumbra mi vida
y me brinda su luz
(Fuente: Semblanzas: Antonio Mesa, Miguel Holguín-Veras)
Podemos escuchar 2 versiones de este hermoso tema en el reproductor